La hipoteca inversa es una modalidad de préstamo por el que el banco abona al hipotecado una renta mensual, poniendo su vivienda como garantía.
Recibe el nombre de inversa, porque a diferencia de las hipotecas convencionales, la deuda no disminuye con el tiempo, sino que va aumentando. Está pensada fundamentalmente para personas de entre 65 y 70 años, dependiendo de la entidad bancaria. Y serán sus herederos los que terminarán asumiendo la deuda.
No se pierde la propiedad, ya que el solicitante puede vivir allí hasta su fallecimiento, o incluso alquilarla. Se puede optar por una hipoteca inversa temporal o vitalicia.
En cuanto al contrato, es muy conveniente que intervenga un asesor independiente como medida cautelar y así verifique que todas las cláusulas son acordes a lo pactado.
Requisitos para pedir una hipoteca inversa:
- Ser mayor de 65 años.
- O, tener una discapacidad igual o superior al 33%
- O, contar con una dependencia severa o gran dependencia
Ventajas:
- Conseguir un ingreso extra para completar la pensión
- Conseguir liquidez de un inmovilizado, sin perder la propiedad o su uso
- Seguir residiendo en la vivienda hasta el fallecimiento
Inconvenientes:
- Tener que contratar un seguro de rentas vitalicias derivadas
- La cuantía de la renta a percibir depende del valor de tasación de la vivienda
- Obligación de que los herederos tengan que hacerse cargo del pago de la deuda
Espero que te haya ayudado, y no olvides compartirlo con todos tus contactos.