Estos cambios son los introducidos por la Agencia Tributaria para la Declaración de la Renta 2023 y que se declara en 2024. Es esencial estar al tanto de todas las novedades sobre los cambios en las leyes fiscales, ya que te permite aprovechar oportunidades de deducción, exención o crédito fiscal. Te ayuda además a evitar errores que podrían resultar en sanciones o auditorías fiscales.

¿Quién está obligado a presentar la declaración?

Aquellos que hayan percibido más de 15.000 euros, o hayan tenido dos o más pagadores, si el total recibido de los segundos y siguientes pagadores supera los 1500 euros en conjunto. Esto implica un aumento en el umbral mínimo para la presentación de la declaración, que previamente estaba en 14.000 euros en estos casos.

Deducciones por obra o mejora

La deducción por realizar mejoras en la eficiencia energética de los inmuebles, se amplía a 2024, aplicable tanto a la vivienda habitual como a inmuebles en alquiler o edificios completos.

Reducción en el IRPF por alquiler de vivienda

Según la nueva normativa, las reducciones quedan establecidas de la siguiente forma:

Venta de una vivienda en el IRPF

Quienes hayan vendido una vivienda deben incluir la ganancia o pérdida patrimonial en el Declaración de la Renta. Si se trata de la transmisión de la vivienda habitual, el contribuyente puede estar exento de pagar impuestos si reinvierte lo ganado en la compra o rehabilitación de su siguiente vivienda habitual, y dicha reinversión debe realizarse en los dos años siguientes a la fecha de la venta.

Se debe rellenar el apartado F2: ganancias y pérdidas patrimoniales.

La Agencia Tributaria te preguntará si vas a reinvertir el dinero en la compra de una vivienda habitual.

Compra de una vivienda en el IRPF

Aunque no se trata de una operación deducible, desde el 2013, sí se debe declarar en el IRPF. En el caso de uso de vivienda habitual, el contribuyente deberá informar, sin tener que abonar impuestos.

En cambio, adquirir una segunda residencia, sí tributa en el IRPF al tratarse de un incremento de patrimonio. En este caso, se aplica la imputación de las rentas inmobiliarias con porcentajes del 2% sobre el valor catastral o del 1.1% para los inmuebles cuyos valores catastrales hayan sido revisados.

Desgravar la hipoteca en el IRPF

Esta deducción sólo se puede practicar sobre una hipoteca contratada para adquirir la vivienda habitual. Dado que se suprimió el 1 de enero de 2013, sólo es aplicable por aquellos que compraron el inmueble (y formalizaron el préstamo), antes del 31 de diciembre de 2012 y que además, aplicaron esta desgravación de la hipoteca en la declaración de la renta de 2012 o en las anteriores.

Los que cumplan los requisitos anteriores, pueden desgravarse hasta un 15% de lo que hayan pagado por la hipoteca durante 2022: un 7,5% en el tramo estatal y un 7,5% más en el tramo autonómico, sobre una base máxima de 9.040 euros anuales, así que el contribuyente puede deducirse un máximo de hasta 1.356 euros.

Conclusión

De todos modos, como te he recomendado tantas veces, lo mejor es acudir a un profesional que analice tu situación fiscal para aplicar las deducciones correspondientes.

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